Tratado IV- El fraile de la Merced

 Anónimo




Hube de buscar el cuarto, y éste fue un fraile de la Merced, que las mujercillas que digo me encaminaron, al cual ellas le llamaban pariente. Gran enemigo del coro y de comer en el convento, perdido por andar fuera, amicísimo de negocios seglares y visitar, tanto que pienso que rompía él más zapatos que todo el convento. Éste me dio los primeros zapatos que rompí en mi vida; mas no me duraron ocho días, ni yo pude con su trote durar más. Y por esto, y por otras cosillas que no digo, salí de él.

Entradas populares de este blog

"El diccionario de Coll"

"El dueño de la luna"

"La ajorca de oro"

Condiciones que ha de tener la mujer para ser bella

Soneto XI: "Hermosas ninfas, que, en el río metidas..."

Soneto V: "Escrito está en mi alma vuestro gesto..."

V: "Lo que sucedió a una zorra con un cuervo que tenia un pedazo de queso en el pico"

La dama del velo blanco

"En un lugar de la Mancha"

"Fe de vida"